Premio al conductor afortunado del año

Por si aún no lo sabíais, lo último que hay que hacer en un atasco es bajarse del coche. Máxime cuando el atasco se dé en condiciones de mínima visibilidad. O si no os pasará lo mismo que a este conductor. Pero probablemente no tengáis tanta suerte. De hecho, es imposible que tengáis la suerte de este conductor que salió ileso de un brutal accidente por muy, pero que muy poquito.

Como veréis en las imágenes, el conductor decidió bajarse de su vehículo para intentar averiguar qué era lo que estaba provocando el gran atasco en el que se encontraba sin saber que, a unos metros de él la abundante niebla dificultaba la visibilidad de un camión que se aproximaba. Dicho camión no pudo frenar a tiempo y se llevó su coche por delante. Y decimos que se llevó solo su coche porque tuvo los reflejos y la suerte de poder esquivarlo a tiempo y no acabar igual de aplastado que su coche.

Pero, como siempre, lo mejor es ver las imágenes y juzgar por vosotros mismos.