En el mundo de hoy, los motores con más de cuatro cilindros no son más que un desperdicio

¿Buscas la elasticidad de un motor de seis cilindros? ¿Quieres un poco de ruido V8? ¿Estás listo para comenzar tu día haciendo comer carbón a algún ciclista? ¿Un V10 es el único motor que estás considerando como alternativa a un V12 o un W16? Si este es tu caso, entonces es hora de leer. Podrías terminar ahorrándote un buen dinero y evitando muchos dolores de cabeza en el futuro.

El mundo es sin duda una ostra si menosprecias a las personas que conducen coches de tres o cuatro cilindros. Desafortunadamente, este tipo de actitud hacia los motores más pequeños con pocos cilindros no ayudará a nadie a largo plazo. Ni a ti, ni a mí, ni al medioambiente. Pero vayamos al grano. La gasolina, actualmente, tiene un precio medio de alrededor de dos euros el litro en todo el país. Si crees que esto es difícil, mira por al resto de Europa, donde en algún que otro país, esa tarifa a rondado incluso los tres euros por litro.

No ayuda que la inflación siga achicando el valor de los ingresos mensuales y las corporaciones –aunque reportando ganancias récord– siguen subiendo los precios aludiendo a los problemas que trae la crisis sanitaria y el inestable contexto geopolítico. Cualquiera que sea el lado en el que estés, no se ve nada bien. Inflación, cheques de estímulo, salarios bajos, altos precios de la energía, problemas de vivienda, problemas de la cadena de suministro, una crisis en Europa, dificultades para obtener repuestos, una China en constante crecimiento…

Esta realidad está poniendo nervioso a casi todo el mundo. Añade a esto el cambio climático y el hecho de que somos bombardeados diariamente con información aleatoria que no ayuda en nada a nuestra situación común, y obtendrás una receta para el desastre que está por suceder. Este es un intento extremadamente breve de resumir objetivamente la situación actual en la que nos encontramos. Ahora coge este contexto tan desafortunado y mira a alguien que tiene en su camino de entrada vehículos con motores potentes de gran cilindrada.

¿Estas personas son conscientes de cómo está el medioambiente o el estado las cosas en este momento? ¿Les importa? Lo más probable es que no. ¿Debería importarles? Si y no. Tenemos dos cosas asombrosas llamadas libertad de expresión y libertad de elección. Si alguien quiere conducir diariamente un Lamborghini Aventador que funciona con un motor V12, que lo haga. Si tu vecino tiene un Lexus LFA que emite ese increíble sonido proveniente del V10, entonces no puede obligarlos a abandonar su coche a favor de un pequeño y urbano.

Pero con tanta libertad vienen muchas responsabilidades y, como todos sabemos, las acciones tienen consecuencias. Solo para poner las cosas en perspectiva: el V8 biturbo que se encuentra actualmente en el BMW M5 desarrolla 635 CV, más de cinco veces más de lo que se necesita un compacto convencional. ¿Quién necesita tanta potencia para ir de un punto a otro? Las vías públicas no son una pista de carreras, razón por la que casi no tiene sentido tener este tipo de coches en la carretera en forma de medio de transporte para un uso diario.

Lo creas o no, lo mismo se aplica a vehículos como el Tesla Model S Plaid o el Porsche Taycan Turbo S. Incluso si son eléctricos, nadie usará tanta potencia para cumplir con sus necesidades diarias. Pero a diferencia de los vehículos eléctricos, los automóviles con motor de combustión interna proporcionan a nuestro medioambiente un cóctel de gases nocivos. Tome solo el dióxido de carbono como ejemplo: contribuye a calentar nuestra atmósfera y también está acidificando lentamente nuestros océanos. La vida silvestre acuática tendrá que adaptarse increíblemente rápido o simplemente desaparecerá si seguimos así.

Nuestro futuro común va a ser eléctrico. Reducir el tamaño de los motores de combustión interna es algo que ha estado ocurriendo desde 2010 y, eventualmente, vender un vehículo que tenga un tubo de escape será ilegal. Pero hasta entonces, debemos actuar. Si no es cómodo o factible tener un vehículo eléctrico en estos momentos, siempre puedes optar por algo con un motor eficiente que case con un sistema eléctrico (híbrido).

Por supuesto, los distintos gobiernos también deberían intervenir y ayudar a aquellos que se dan por vencidos con los consumidores de gasolina. Las ayudas momentáneas para comprar un coche eléctrico no son suficientes. Debería haber más apoyo para aquellos que compran esta clase de vehículos de cero emisiones, pero los políticos también deberían ayudar a la población que quiere vehículos con motor de combustión interna más eficientes.

Pero una cosa está clara: deberíamos empezar a consumir menos combustibles fósiles. No los tendremos en cantidades ilimitadas por mucho más tiempo, y la energía ya se está convirtiendo en una herramienta política o incluso diplomática. La energía solar, eólica e hidroeléctrica podría ayudarnos a todos a obtener un poco más de independencia de la red. Nuestras casas y nuestro presupuesto mensual podrían beneficiarse mucho de la energía solar.

A estas alturas, podrías pensar que estás leyendo las palabras de un socialista o un eco-marxista. Te aseguro que no es el caso. Yo mismo conduzco un vehículo de seis cilindros. Yo también tengo la culpa de tener una huella de carbono innecesariamente grande. Pero eso no significa que no sepa que un cambio debe ocurrir tarde o temprano. Y me estoy preparando para ello. El cambio ocurrirá más temprano que tarde, incluso si significa pagar un poco más.

Al fin y al cabo, una cosa está clara: si estás deseando ahorrar algo de dinero y poner de tu parte en la protección de nuestro medio ambiente, entonces apuesta por el transporte público, formas alternativas de ir del punto A al punto B y compra un coche que tiene un motor de cuatro cilindros como máximo hará maravillas para usted. Sí, en estos momentos deberíamos tener en cuenta seriamente el hecho de que existe un reemplazo viable para los desplazamientos del día a día.