Medicamentos

¿Qué efectos pueden causar sobre mi conducción?

¿Cómo afectan los medicamentos a la conducción?

¿Con cuáles podrías dar positivo en un control de drogas?

Los medicamentos siempre son motivo de preocupación. Nuestro organismo es vulnerable a multitud de agentes maliciosos, y sin ellos es muy probable que la vida fuese mucho más difícil para una gran mayoría. Al fin y al cabo, los medicamentos son sustancias químicas que alteran nuestras entrañas. Casualmente, es una defición que también es aplicable a las drogas y el alcohol.

A estas alturas, resulta redundante mencionar que mezclar la conducción con el alcohol y/o las drogas es una de las peores ideas que se te pueden ocurrir. Sin embargo, parece que hay que seguir haciendo hincapié en ello. Aún todavía persisten quienes circulan bajo los efectos de estas sustancias, a sabiendas de que aumentan el porcentaje de sufrir un accidente o, peor aún, de causar uno donde haya terceras personas implicadas. La Dirección General de Tráfico (DGT) lo menciona en sus campañas, pero es de sentido común.

Ahora bien, ¿qué ocurre con los medicamentos? Son legales, sí, y están presentes en la vida de un elevado porcentaje de la población, pero eso no quita que también sean un peligro más que afecta a nuestras dotes de piloto. Incluso aquellos que no precisan de una receta médica pueden damnificar dichas habilidades. Si estás tomando un medicamento recetado, o consumiendo una dosis más alta, no te pongas tras el volante de un coche hasta que sepas qué efectos tiene sobre tu juicio, tu coordinación y tu tiempo de reacción.

¿Qué efectos puede causar un medicamento sobre mi conducción?

La mayoría de las personas no se dan cuenta de que muchos medicamentos recetados y de venta libre pueden causar somnolencia y afectar la capacidad de conducirincluso cuando se utilizan de acuerdo con las instrucciones. Es extremadamente importante asegurarse de leer cuidadosamente los detalles del producto antes de ingerirlo, y si tienes dudas, no repares en preguntarle a un farmacéutico (a uno de verdad, no el que dice que “tranqui, que por una pasti no pasa ná”).

Ciertamente, la mayoría de los medicamentos no afectarán a tu capacidad para conducir. Sin embargo, cada organismo es único y le afectan las cosas de distintas maneras. Porque los efectos secundarios, aunque extraños de manifestarse, existen, y por eso aparecen escritos en las instrucciones. Además de la mencionada somnolencia, otros daños colaterales típicos pueden ser: visión borrosa, mareos, desmayos, náuseas, incapacidad para concentrarse o prestar atención, excitación o una capacidad mermada del movimiento.

Algunos medicamentos afectan a la capacidad para conducir durante un breve período tras consumirlos. Para otros, estos pueden durar desde varias horas hasta incluso hasta el día siguiente. Y algunos tienen una advertencia impresa para no operar maquinaria pesada; esto incluye conducir un coche, un autobús, un tren, un avión o un barco. Bueno, en realidad, si se diese el hecho, no deberías de tomar el mando ni de un carrito de la compra. Este tipo de medicamentos suele ser bastante fuerte para el organismo.

¿Qué medicamentos pueden resultar en un falso positivo?

Saber cómo un medicamento, o cualquier combinación de ellos, afectan a tu capacidad para conducir es una medida de seguridad muy inteligente. Algunos de las que pueden hacer que conducir sea peligroso incluyen analgésicos opioides, fármacos recetados para la ansiedad, anticonvulsivos, antipsicóticos, antidepresivos, productos con codeína, algunos remedios para el resfriado y productos para la alergia, pastillas para dormir, relajantes musculares, pastillas para adelgazar, para “mantenerse despierto” y otros estimulantes.

A continuación, dejamos reflejada una lista con posibles medicamentos que pueden llegar a ofrecer un falso positivo en un control de drogas de la Dirección General de Tráfico (DGT). Cabe decir que estos medicamentos no afectarán a la conducción de todas las personas. Depende de la tolerancia al producto, de cuánto tiempo se consuma antes de conducir, de qué otros medicamentos uno se esté tomando y de la afección médica. Así que de la misma forma que pueden no afectarte en nada, también puedes acabar condenado por Tráfico.

  • Bromfeniramina (Ilvico)
  • Bupropion (Zyntabac, Elontril)
  • Clomipramina (Anafranil)
  • Clorpromazina (Largactil)
  • Dextrometorfano (Romilar)
  • Difenhidramina (Bisolvon antitusivo compositum y otros)
  • Doxilamina (Cariban, Dormidina y otros)
  • Ibuprofeno
  • Naproxeno
  • Ofloxacino (Surnox)
  • Prometazina (Actithiol antihistamínico, Fenergan expectorante)
  • Quetiapina (Seroquel)
  • Ranitidina
  • Sertralina
  • Tioridazina
  • Trazodona (Deprax)
  • Venlafaxina
  • Verapamil

Conclusión

No importa cómo lo intentes defender: si alguien se siente colocado, ebrio, distraído o muy cansado, está incapacitada para llevar un vehículo a motor y no debe ponerse al volante. Recuerda, antes de tomarte un medicamento, se consciente de las consecuencias y de cómo podría afectar a tu cuerpo y mente. Y si crees que un medicamento en concreto puede estar afectando a tu manera de conducir, no dejes de consumirlo, deja de conducir y consultalo con tu médico. Puede haber otros medicamentos más apropiados.

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