Uno de los accidentes más caros del año
Algunos accidentes son más caros que otros. Y este que os contamos, tiene pinta de ser muy, muy caro. El accidente en cuestión ocurrió en Nürburgring y ha sido protagonizado por un Koenigsegg One:1 que había acudido al trazado alemán para intentar batir el récord de vuelta para un coche de producción.
Sin embargo, algo ocurrió mal y el superdeportivo sueco acabó en este estado:
Pese a la brutalidad del impacto, el piloto salió relativamente ileso y tuvo que pasar unas horas en el hospital. Eso sí, el coche acabó en un estado lamentable. Aunque la marca ya ha anunciado que piensa reconstruir esta auténtica maravilla que pesa 1.341 CV, ¡tantos como kilogramos pesa!
El fabricante sueco ha anunciado que el accidente se debió a un fallo registrado en uno de los sensores del ABS. Lo que activó un sistema de seguridad que libera las ruedas traseras aunque las delanteras estén bloqueadas. De esta forma, el coche, en lugar de girar descontroladamente, sigue una trayectoria recta. Cuando el coche llegó a las barreras y colisionó contra ellas, iba ya a 110 km/h. El accidente lanzó al superdeportivo por los aires,avanzando un 22 metros antes de que aterrizara sobre su rueda trasera izquierda.
Después del impacto se inició un incendio que el propio piloto pudo extinguir.
En este vídeo podéis ver el estado en el que quedó el coche tras el accidente:
