¿Qué se recicla de un coche?
Ya hemos visto qué piezas merece la pena comprar en un desguace. Hoy veremos en qué consiste el proceso de reciclaje de un coche y qué se puede reciclar de él.
Evidentemente, lo primero que hay que hay que hacer es dar de baja el coche en Tráfico. Posteriormente, ya en el desguace, comenzarán el proceso.
Lo primero que harán será retirar los componentes peligrosos y contaminantes: filtro de aceite, combustible, batería, gases y líquidos.
Luego clasificarán y almacenarán los elementos reutilizables (retrovisores, amortiguadores, motores, etc...)
Todo lo demás va a la prensa que lo convierta en chatarra, que posteriormente serán enviados a otras empresas para separar los metales del vidrio y otras impurezas.
De estos materiales los que más se reciclan son la chapa, aceros y metales, como el cobre, aluminio y zinc que se reciclan en un 75%.
Los neumáticos y otras piezas de caucho se aprovechan en un 4%. El anticongelante y líquido de frenos, así como el aceite, se reciclan y significan un 1% del total de reciclaje del coche. Los plásticos también (suponen de un 3,5 a un 5,5% del reciclaje total del coche). El vidrio de las ventanillas también se recicla y suponen un 3,5% del reciclaje total.
La tapicería y el resto de materiales y piezas son difíciles de reciclar. Por ejemplo, zapatas de freno o filtros de aceite solo se pueden aprovechar en un 0,8%. Todo lo demás acaba en la basura.
