Hablemos de la M30
Hablemos hoy de una de las vías más conocidas de nuestro país: la M-30. Una vía que rodea la ciudad de Madrid de 32,5 kilómetros y 65 salidas que lleva años siendo la vía más transitada de nuestro país y una de las más peligrosas. De hecho, solo durante los primeros seis meses de este año se han registrado 4.566 incidentes en superficie de los cuales 263 han sido accidentes graves. Y en los túneles se han contabilizado 1.789 incidentes, 44 de ellos graves.
Las causas de este alto nivel de siniestrabilidad se debe al gran número de carteles informativos (742). Muchos de ellos aparecen demasiado tarde con lo que te obligan a cambiarte de carril en poco tiempo o acabar en Leganés cuando quieres ir a Burgos. Y claro, cambiar de carril en una carretera por la que circulan a diario un total de 1.409.000 vehículos en jornada laborable, pues suele tener el peligro de encontrarte con un coche ocupando el carril al que te quieres mover. Eso sumado a que todos los coches circulan a la misma velocidad de entre 60-70 km/h deja muy poco margen para realizar adelantamientos ágiles por riesgo a ser multado por uno de los múltiples radares que se hallan por toda la vida.
Aún así, la vía es una de las más controlada de Europa tras las faraónicas obras de Gallardón a principios de este siglo.
Actualmente está controlada por 900 cámaras de vigilancia. Existe una enorme sala de control, con pantallas vigilan día y noche, y una web de acceso libre permite que cualquier usuario conozca en tiempo real el número de vehículos que la están utilizando, las retenciones, las obras o los accidentes.
