Evitar el 50% de los accidentes mortales es posible
Según un informe, los sistemas de asistencia avanzada al conductor como los que detectan riesgo e atropellos a peatones y ciclistas, los que avisan del riesgo de colisión frontal, los que alertan del cambio involuntario de carril, los detectores de fatiga y de consumo de alcohol entre otros, de instalarse en todos los coches podrían ahorrar hasta 850 muertes al año y más de 50.000 siniestros al año.
Sin embargo, quedan muchos años para que estos sistemas estén instalados en todos los coches de serie. A día de hoy solo están disponibles en un 20% de los coches que se comercializan.
Para los fabricantes, la instalación de estos sistemas supondría unos 800 euros, pero el ahorro sería de unos 4.300 millones en asistencia sanitaria.
Otras propuestas del informe, elaborados por diversas asociaciones de víctimas de accidentes de tráfico y una empresa tecnológica, pasan por la instalación de cajas negras, limitadores de velocidad y alcoholímetros que impidiesen la puesta en marcha del coche ante niveles altos de alcoholemia del conductor.
Pero nada de esto serviría si no se renovase el parque automovilístico español, uno de los más viejos de Europa, por lo que el informe recomienda también un nuevo plan PIVE que apoye económicamente un equipamiento como alertas de colisión, sistemas de airbags adicionales y cámaras traseras.
