Cómo hacer más seguro un coche viejo

La realidad es que,a  día de hoy, la edad media de los coches que circulan por las carreteras españolas supera los 10 años de edad. Estos vehículos, además de contaminar más, son más inseguros. No solo porque sus piezas han sufrido un mayor desgaste, sino porque no llevan incorporadas muchas de los dispositivos de seguridad pasiva y activa que han aparecido en los últimos años.

Sin embargo, hay pequeñas cosas que podemos hacer para que nuestro viejo coche sea más seguro.

Por ejemplo, usando nuestro móvil. Y es que existen varias apps de ayuda al conductor: tecnologías de detección de fatiga, alerta de salida involuntaria de carril o lector de las señales del pavimento son propias de coches de última factura y que puedes tener en el tuyo con ayuda de tu móvil.

Ya existen aplicaciones que muestran la distancia real que existe entre tu coche y el vehículo que te precede. La aplicación utiliza la cámara del teléfono y una serie de sensores para calcular a qué distancia se encuentran los otros vehículos y utiliza alertas sonoras cuando esta es menor de la recomendada.

Sin embargo, la medida más segura sigue siendo la más conocida: revisar suspensión y la presión de los neumáticos.

Los neumáticos deben estar siempre en perfecto estado, sea cual sea la edad del coche que los monta y como el amortiguador es lo que hace que el neumático esté en contacto con la carretera, es igual de importante que esté en buen estado. Es lo que hará que el coche no vaya dando botes y vaya firmemente agarrado a la vía.